En este artículo vamos a ver como un terapéuta ocupacional puede ayudarte en la gestión del estrés diario.
Mi corazón late con fuerza. Me duele. Estoy agotado. Mis pensamientos están completamente dispersos, al igual que los archivos y las tazas de café de mi escritorio.
«Tienes que relajarte, el estrés laboral es perfectamente normal», es lo que me decían los demás.
La mayoría de la gente está deseando que acabe la jornada laboral para poder irse a casa y relajarse. Yo, en cambio, lo temo.
Sólo puedo pensar en la interminable lista de tareas que me esperan en casa.
¿Por qué no puedo hacer las cosas que a los demás les parecen tan sencillas?
Siento que apenas soy capaz de mantener la cabeza fuera del agua mientras todos los demás nadan a mi lado.
¿Cómo se supone que voy a equilibrarlo todo?
¿Cómo voy a pasar el resto del día?
Pongamos las cosas en su sitio.
No es de extrañar que todos experimentemos estrés en algún momento de nuestras vidas. De hecho, el 73% de los adultos trabajadores de entre 20 y 64 años declaran tener algún nivel de estrés.
El estrés es sistémico; todos lo experimentamos en nuestra vida diaria.
Lo que diferencia el estrés bueno del malo, es la forma en que elegimos pensar en él, sentirlo y responder a él.
- Cuando aprovechamos el estrés para el bien, nos da energía, alimenta la positividad y puede ayudarnos a desarrollar grandes mecanismos de afrontamiento.
- Cuando no combatimos el estrés malo, nos golpea hasta la médula y afecta significativamente a nuestra capacidad para realizar tareas aparentemente sencillas.
¿Cómo pueden los terapeutas ocupacionales ayudar a gestionar mi estrés?
Los terapeutas ocupacionales ayudan a resolver los problemas, que interfieren en nuestra capacidad para hacer las cosas que son importantes para nosotros, cosas cotidianas como:
- El autocuidado (comer, la higiene personal, vestirse).
- Ser productivo (ir al trabajo, hacer la compra, pagar las facturas).
- Actividades de ocio (deportes, jardinería, actividades sociales).
El estrés no tiene límites. Cuando el estrés se apodera de nosotros, puede afectar a todas las áreas funcionales.
Y aquí es donde entran en juego los terapeutas ocupacionales.
Estamos formados para ayudar a las personas a recuperar la funcionalidad en los distintos ámbitos de la vida.
La Asociación Canadiense de Terapia Ocupacional sostiene que el rendimiento ocupacional es el resultado de la interacción dinámica entre la persona, el entorno y la ocupación: cuando uno de ellos cambia, todo lo demás se ve afectado y el rendimiento cambia.
El terapeuta ocupacional y la gestión de estrés
La Terapia Ocupacional es única porque adopta un enfoque holístico de la salud y el bienestar. Cuando un terapeuta ocupacional atiende a una persona que sufre de estrés crónico, no se limita a examinar los factores individuales, sino que examina la interacción entre la persona, su entorno y sus ocupaciones.
10 de las formas en que la Terapia Ocupacional puede ayudar a gestionar el estrés
1. Apoyar en el desarrollo de adaptaciones conductuales.
2. Intervenir con técnicas de reducción del estrés basadas en la atención plena.
3. Proporcionar entrenamiento de conservación de energía para aquellos que experimentan fatiga crónica.
4. Proporcionar estrategias y ejercicios para el manejo del dolor crónico.
5. Reestructuración cognitiva para reducir la reflexión sobre los pensamientos negativos.
6. Ayudar a identificar estrategias que distraigan o auto-calmen al individuo cuando siente síntomas de estrés.
7. Proporcionar recomendaciones para las modificaciones del entorno.
8. Facilitar y ayudar en la planificación de la vuelta al trabajo.
9. Desarrollar un programa de endurecimiento del trabajo para minimizar el riesgo de recaída.
10. Entrenamiento laboral funcional y cognitivo para proporcionar estrategias en situaciones de la vida real.